De París a Rusia – Surrealismo

Uno de los movimientos artísticos más impactantes de todos los tiempos nos ha inspirado a diseñar un hermoso bouquet. Acompañanos a descubrirlo mientras nos detenemos a hablar un poco sobre este momento en la historia del arte.

El Surrealismo comienza en 1924 en París con la publicación del «Manifiesto Surrealista» de André Breton, quien aclamaba que la situación histórica de posguerra exigía un arte nuevo que indagara en lo más profundo del ser humano para comprender al hombre en su totalidad. El Surrealismo propone una teoría de lo inconsciente y de lo irracional como medio para cambiar la vida, la sociedad, el arte y el hombre por medio de la revolución. No es un movimiento con unidad de estilo, sino una serie de investigaciones de artistas individuales, cada uno con un estilo propio.

La literatura y el arte surrealistas se vincularon estrechamente con el psicoanálisis y las ideas de Sigmund Freud. Por ende, el surrealismo se caracterizó por la indagación del subconsciente, la expresión desinhibida del pensamiento, el uso del automatismo psíquico como método y la colaboración entre diferentes disciplinas artísticas. Aunque originalmente el movimiento surrealista comienza en Francia, se expande rápidamente al resto de Europa y algunos lugares de América. Encontrará poco después, un epicentro en Almenaia, en donde surgirán innumerables obras de este movimiento.

Algunos de los principales exponentes de este momento acrítico fueron André Breton, Salvador Dalí, René Magritte, Pablo Picasso, Frida Kahlo y  Andrey Gorenkov

Bouquet silvestre, de colores llamativos, pero que a la vez contiene detalles delicados. Genera contraste y capta la atención. Con diferentes tonos de verde. A simple vista se distingue una gran rosa.

Parecido a este cuadro de Andrey Gorenkov, artista ruso dedicado al surrealismo. En el mismo se aprecia también la presencia de una rosa en un tono de color similar, en este caso, formando parte del centro de la imagen. Es muy interesante analizar los distintos elementos que componen esta obra, ya que la misma es, de por sí, subjetiva. Entonces cada objeto tendrá un significado completamente diferente, dependiendo quien lo mire. Como por ejemplo ese gran caracol a la izquierda del cuadro, ¿querrá Gorenkov hacernos entender que antes había ahí un mar?, ¿y que el mismo se secó?

¿Conoces más características sobre el movimiento surrealista que quieras compartir con nosotros? Escríbenos en los comentarios.

Bodegones pintados por Andrey Gorenkov