Como afrontar la pérdida de un ser querido
La pérdida de un ser querido es un momento delicado, que realmente no hay una guía práctica de como enfrentarlo. La muerte es algo que no se suele hablar, pero siempre llega, algunos jóvenes otros los alcanza al final de una vida. Sin importar el momento, es un momento difícil que lleva su debido proceso de sanación.
Las situaciones en las cuales se producen estas perdidas pueden ser inesperadas, trágicas, tristes, incomprensibles a la razón, algunas son esperadas por problemas de salud y en muchos casos un alivio para una vida larga el poder partir en paz. Las reacciones ante momentos de este tipo son variadas, dependen de la relación que tenían, su cercanía, el afecto y lo vivido juntos. Ni hablamos ante la perdida de tu compañera/o de vida. Ciertamente la partida de un ser querido deja sensaciones contradictorias de sus allegados, son esos momentos en donde te preguntas:
¿Por qué no pase más tiempo con ella/él? ¿Cuándo fue la última vez que me tome un tiempo para charlar? ¿Por qué no te valore mas cuando te tenía? ¿No pude hacer algo mas por ti? ¿Qué voy a hacer ahora sin ti?
Seguramente cada uno tendrán sus propias memorias escritas con tintas de tristeza, de agradecimiento, de una nostalgia o bien de una impotencia. De saber que no sabes cuando, pero sabes que esa persona partirá pronto, quedando solo el vacío y las lágrimas. Son casos así cuando tu mente entra en una galería de recuerdos compartidos, algunos felices, otros de enojo, algunos de risa, entre otros todos teñidos por ese velo de nostalgia ante una situación que no se puede hacer mas que esperar .
¿Quién no recuerda la primera cita con su pareja? ¿Esa comida casera que nos hacia nuestras madre o abuelos? Ese sabor que no se olvida. ¿Los viajes de pesca? ¿Con quién aprendiste a andar en bici? Los paseos a la plaza o sencillamente las tardes compartiendo el mate con las noticias del día a día.
Ni toquemos por ahora los cumpleaños, aniversarios y fechas como navidad.
Son momentos de duelo donde el dolor se transita a su manera, cada uno lo expresa a su modo, lo vive, lo siente en su interior. Hay consuelos religiosos donde el rezar por ese ser querido consuela el alma de los que quedaron aún. Hay consuelos personales como mantener vivos los legados que nos han dejado, y otros que solo el tiempo brinda.
Más allá de como se de las situaciones, lo importante es el estar juntos en esos momentos, el escuchar al otro, un abrazo puede decir mucho sin decir una palabra, el consuelo de valorar los buenos momentos que vivieron por sobre el dolor. Un ramo de flores puede transmitir ese apoyo a esa persona que pasa por un duelo. Quizás algo ingenuo y sentimental para algunos, pero como he dicho antes, todos caminamos con esos zapatos de manera distinta.
Muchos sitios mencionan los 5 pasos de un duelo en proceso (Negación, ira, negociación, depresión y aceptación) pero aquí lo tomare de manera más personal.
Por eso voy a dejar a continuación unos consejos para estas situaciones de duelo, dolor y consuelo: