Mirto: La flor de las bodas reales
La familia real británica tiene muchísimas tradiciones, y las suelen acompañar con flores hermosas. Hoy nos gustaría contarles sobre una en específico: El mirto ¿Conocés esta delicada flor? ¿Tenés idea por qué acompañó a la realeza en sus días más importantes? Te invitamos a seguir leyendo.
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El mirto es una planta de la familia Myrtaceae y es originaria del sudeste de Europa y el norte de África. Cuando florece en primavera vemos un arbusto aromático con flores blancas y estambres amarillos.
Pero lo que realmente nos llama la atención de esta flor es su lealtad con la realeza británica. El mirto ha acompañado a las bodas de la familia real desde hace más de un siglo ¿Te imaginas por qué? Es gracias a un regalo por parte de la abuela del Príncipe Alberto a la Reina Victoria. Desde Alemania, esta flor fue llevada al Castillo de Osborne y desde entonces florece en ese mismo jardín.
Con este regalo la tradición comienza. La Princesa Victoria, hija de la Reina Victoria, es la primera en llevar mirtos en su ramo en 1858 cuando se casa con el Príncipe Federico.
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La tradición continua a lo largo del tiempo y pudimos ver mirtos en los bouquets de figuras icónicas de la modernidad como la Reina Isabel, la Princesa Diana, la Duquesa Kate Middleton y finalmente, Meghan Markle.
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Pero, ¿Por qué le regalaron a la Reina Victoria esta flor?
Resulta que el mirto tiene una historia más vieja que la realeza, esta flor aparece en la mitología griega y se la asocia con Afrodita. Cuenta la historia que un día Afrodita se encontraba en la playa y de repente apareció un grupo de sátiros que no paraba de mirarla, ante el acoso ella decidió esconderse detrás de un seto mirtos. Los sátiros fueron a buscarla y gracias a este arbusto no la encontraron. Agradecida, Afrodita le da al mirto ese delicioso aroma que los caracteriza. Es más, en el cuadro “El nacimiento de Venus” de Sandro Botticelli se pueden ver mirtos cayendo al lado de la Diosa Griega.
”El nacimiento de Venus” Cuadro de Sandro Boticelli. Imagen de wikiart.org
Con el paso del tiempo, el mirto se convirtió en un símbolo de amor, fertilidad e inocencia, y se comenzó a utilizar en las bodas de la antigua Grecia. Esta tradición perduró a lo largo del tiempo y por eso la madre del Príncipe Alberto quiso regalarle esta hermosa flor a la Reina Victoria, ¡Le deseó una vida llena de amor y compañía! No hay mejor regalo que este.
¡Esperamos que te haya gustado este artículo! Si querés saber sobre otras flores que acompañan a la familia real, te dejamos a mano ¿Cuáles son las flores que acompañaron a la realeza británica?
