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Medallita Milagrosa: Por qué regalarla junto con nuestros ramos

Un gesto de fe que acompaña a la belleza de las flores

En Cecile Boutique creemos que las flores no solo decoran: acompañan, protegen e iluminan. Por eso, en fechas especiales dedicadas a la Virgen, muchos de nuestros ramos incluyen una Medallita Milagrosa, un símbolo cargado de historia y de esperanza.

Lejos de ser un simple accesorio, esta medalla tiene su origen en uno de los momentos espirituales más profundos de la tradición católica. Su presencia junto a un ramo transforma ese obsequio en un gesto de amor, devoción y compañía.

El origen de la Medalla Milagrosa

La historia de la medalla surge de una experiencia mística vivida por Santa Catalina Labouré, una joven novicia de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. En la noche del 18 al 19 de julio de 1830, un niño misterioso la condujo a la capilla. Allí, en un silencio absoluto, Catalina se encontró frente a la Virgen María.

Durante horas mantuvieron una conversación profunda hecha de palabras y gestos. Antes de despedirse, la Virgen le confió una misión: crear una medalla tal como la había visto durante la aparición. Desde entonces, la Iglesia la conoce como la Medalla Milagrosa.

El significado de sus símbolos

Cada elemento de esta medalla tiene un sentido espiritual:

-La Virgen de pie sobre el mundo: su papel como reina del cielo y de la tierra.
-La serpiente bajo sus pies: el triunfo del bien sobre el mal.
-Las doce estrellas y el manto celeste: alusión a la mujer del Apocalipsis.
-Los rayos que nacen de sus manos: las gracias que la Virgen concede a quienes las piden.
-La inscripción “Oh María”: afirmación de su Inmaculada Concepción.
-La “M” entrelazada con la cruz: la unión espiritual entre María y Jesús.
-Los Sagrados Corazones: la devoción a Jesús y María en la vida cristiana.

Por este conjunto de símbolos, la medalla es considerada un signo de protección, luz y compañía.

Por qué la acompañamos con nuestros ramos

Cuando se regalan flores a la Virgen o a una persona querida, buscamos que ese gesto tenga un significado profundo. La Medallita Milagrosa se convierte en:

Un recordatorio de que la protección de la Virgen acompaña a quienes la llevan.
Un símbolo de devoción que da sentido espiritual al regalo.
Un detalle que permanece aun cuando las flores ya no estén.
Un complemento que transforma el ramo en un acto de intención y agradecimiento.

Nuestro deseo

Cada arreglo que preparamos para el Día de la Virgen y para otras ocasiones devocionales busca transmitir amor, fe y gratitud. Por eso lo acompañamos con una Medallita Milagrosa: para que quien reciba el ramo sienta la presencia y la ternura de la Virgen mucho después de que las flores hayan cumplido su ciclo.