Los Morus (moras) son árboles de crecimiento rápido y hojas caducas, muy valorados por su fruto comestible y su uso ornamental y agroforestal. Las especies más comunes son la mora blanca (Morus alba), la mora negra (Morus nigra) y la mora roja (Morus rubra). 

Características principales:

Altura: Generalmente alcanzan entre 6 y 15 metros.

Fruto: Agregado de pequeños drupáceos (la “mora”), que madura de tonos blancos/rojizos a púrpura/negro según la especie; muy apreciado para consumo fresco o procesado. 

Adaptabilidad: Se adapta a suelos diversos y climas templados.

Cuidados básicos:

Exposición: Prefiere pleno sol para buena producción de fruta.

Riego y suelo: Suelo bien drenado; riego moderado —más frecuente en plantas jóvenes o en veranos secos.

Poda: Poda de formación los primeros años y limpieza anual para eliminar ramas muertas y favorecer la aireación. 

Resistencia y plagas: Relativamente resistente, aunque pueden afectar pulgones, ácaros u hongos en condiciones húmedas; vigilar y aplicar manejo integrado si es necesario.